Con mucho entusiasmo vivimos en la Provincia el Congreso Virtual Continental sobre vida Consagrada, animado por la CLAR, con más de 9000 participantes de de los cuatro continentes. No tenemos sino motivos para agradecer tanto bien recibido, desde el saludo personalizado del Papa Francisco, hasta los conferencistas y talleristas. Solo queda pedir al Señor que los buenos deseos e iluminación recibida, se concreticen en una Iglesia en salida, una vida religiosa en sinodalidad, viviendo la intercongregacionalidad y la interculturalidad con un nuevo sentido.
Estas son las opciones expresadas al final del Congreso: Opción por la presencia, lugar de gracia; por la bondadosa cercanía, abrigo ético que dignifica; por la escucha, susurro que trae la conversión; por la palabra, medicina para la sanación; por el discernimiento, escenario para el Espíritu; por los procesos, fundamentales para desplegar la vida; por lo comunitario, tejido vital que articula; por la misericordia, que dinamiza el compromiso solidario; por la interioridad, que repuebla las razones para existir; por la Casa Común, lugar de la manifestación de Dios.